La vejez no significa nada más que dejar de sufrir por el pasado.
Stefan Zweig
Es un pensamiento que no conduce a nada, una matemática que no establece nada, un arte que no deja obra, una arquitectura sin materia. Pero ha demostrado, sin embargo, ser más perdurable, a su modo, que los libros o que cualquier otro monumento.
Stefan Zweig
Este juego pertenece a todos los pueblos y a todas las épocas y nadie puede saber de él qué divinidad lo regaló a la Tierra para matar el tedio, aguzar el espíritu y estimular el alma.
Stefan Zweig
La medida más segura de toda fuerza es la resistencia que vence.
Stefan Zweig
Primera muestra de una auténtica vocación política lo es, en todo tiempo, que un hombre renuncie desde el principio a exigir aquello que es inalcanzable para él.
Stefan Zweig
Nada torna a la gente más desnaturalizada e insubordinada que una larga y constante ociosidad.
Stefan Zweig
No basta con pensar en la muerte, sino que se debe tenerla siempre delante. Entonces la vida se hace más solemne, más importante, más fecunda y alegre.
Stefan Zweig
Aquellos que anuncian que luchan en favor de Dios son siempre los hombres menos pacíficos de la Tierra. Como creen percibir mensajes celestiales, tienen sordos los oídos para toda palabra de humanidad.
Stefan Zweig
En algunas ocasiones no es nada más que una puerta muy delgada lo que separa a los niños de lo que nosotros llamamos mundo real, y un poco de viento pude abrirla.
Stefan Zweig
Toda ciencia viene del dolor. El dolor busca siempre la causa de las cosas, mientras que el bienestar se inclina a estar quieto y a no volver la mirada atrás.
Stefan Zweig
El amor es como el vino, y como el vino también, a unos reconforta y a otros destroza.
Stefan Zweig
Pero llamarle juego, ¿no es limitarle injuriosamente? ¿No es también una ciencia, un arte algo sutil que está suspendido entre uno y otro jugador, como el féretro de mahoma entre el cielo y la tierra? El origen del juego del ajedrez se pierde en la noche de los tiempos, y, sin embargo, resulta siempre nuevo; su marcha es mecánica, pero su resultado se debe siempre a la imaginación de los jugadores.
Stefan Zweig