El barco en que he de ir está en el puerto; a éste seguirá otro en que tú vayas. Te esperarán mis brazos, no se en dónde... tal vez en algún puerto... ¡en una playa!
Concha Mendez
Eran verdes como un mar, con reflejos de alto cielo. ¡Qué bien sabían mirar! unos ojos que recuerdo.
Concha Mendez
Ven a mí que vas herido que en este lecho de sueños podrás descansar conmigo.
Concha Mendez
Mi corazón que es cuna que en secreto te guarda.
Concha Mendez
Como un último retrato, en nuestros ojos impresas lucirán nuestras miradas.
Concha Mendez
Y si miro hacia la sombra donde la luz se deshace, temo también deshacerme y entre la sombra quedarme confundida para siempre.
Concha Mendez
Quisiera tener varias sonrisas de recambio y un vasto repertorio de modos de expresarme.
Concha Mendez
Brazos que te sujetaron para alejarte de mí, ¡a mí sí que me salvaron!.
Concha Mendez
Yo quisiera ¡y no puedo! ser como son los otros, los que pueblan el mundo y se llaman humanos: siempre el beso en el labio, ocultando los hechos y al final... el lavarse tan tranquilos las manos.
Concha Mendez
Tan sola no me has dejado, que estoy conmigo y me basta, igual que siempre lo he estado.
Concha Mendez
Se repartió mi alma para formar tu alma. y fueron nueve lunas y fue toda una angustia de días sin reposo y noches desveladas.
Concha Mendez