Entre el ruido de las armas las leyes no se pueden escuchar.
Ciceron
La evidencia es la más decisiva demostración.
Ciceron
No hay deber más necesario que el de dar las gracias.
Ciceron
Somos más sinceros cuando estamos iracundos que cuando estamos tranquilos.
Ciceron
Aun cuando digan la verdad, los mentirosos no son creídos.
Ciceron
Una vida feliz consiste en tener tranquilidad de espíritu.
Ciceron
La verdadera medicina de la mente es la filosofía.
Ciceron
La esclavitud es la sujeción de un espíritu débil y cobarde que no es dueño de su voluntad.
Ciceron
La libertad no consiste en tener un buen amo, sino en no tenerlo.
Ciceron
Por la costumbre se forma casi otra naturaleza.
Ciceron
El propósito de la justicia es dar a cada quien lo debido.
Ciceron
Dedicarse constantemente a una misma cosa vence con frecuencia al talento y al arte.
Ciceron
Cuanto mejor es una persona, más dificilmente sospecha de la maldad de los demás.
Ciceron
La falsedad está tan cercana a la verdad, que el hombre prudente no debe situarse en un terreno resbaladizo.
Cicerón
La naturaleza ha puesto en nuestras mentes un insaciable deseo de ver la verdad.
Cicerón