Si no actúas como piensas, vas a terminar pensando como actúas.
Blaise Pascal
Para quienes no ansían sino ver, hay luz bastante; más para quienes tienen opuesta disposición, siempre hay bastante oscuridad.
Blaise Pascal
La elocuencia es una pintura del pensamiento, y por esto los que después de haber pintado añaden algo más, hacen un cuadro en lugar de un retrato.
Blaise Pascal
Descripción del hombre: dependencia, deseo de independencia, necesidad.
Blaise Pascal
¿De qué le sirve al hombre ganar el mundo si pierde su alma?
Blaise Pascal
Los que poseen el espíritu de discernimiento saben cuanta diferencia puede mediar entre dos palabras parecidas, según los lugares y las circunstancias que las acompañen.
Blaise Pascal
El espíritu cree naturalmente y la voluntad naturalmente ama; de modo que, a falta de objetos verdaderos, es preciso apegarse a los falsos.
Blaise Pascal
El hombre es naturalmente crédulo, incrédulo; tímido, temerario.
Blaise Pascal
La conciencia es el mejor libro moral que tenemos.
Blaise Pascal
La mayoría de los males les vienen a los hombres por no quedarse en casa.
Blaise Pascal
La moral es la ciencia por excelencia; es el arte de vivir bien y de ser dichoso.
Blaise Pascal
Cuando no se ama demasiado no se ama lo suficiente.
Blaise Pascal
El arte de persuadir consiste tanto en el de agradar como en el de convencer; ya que los hombres se gobiernan más por el capricho que por la razón.
Blaise Pascal
Sabed que el hombre supera infinitamente al hombre.
Blaise Pascal
Los mejores libros son aquellos que quienes los leen creen que también ellos pudieron haberlos escrito.
Blaise Pascal
Cuando leemos demasiado deprisa o demasiado despacio, no entendemos nada.
Blaise Pascal
A la verdad se llega no sólo por la razón, sino también por el corazón.
Blaise Pascal
La verdad es útil a quien la escucha, pero desventajosa a quien la dice, porque lo hace odioso.
Blaise Pascal
Ni la contradicción es indicio de falsedad, ni la falta de contradicción es indicio de verdad.
Blaise Pascal
Existe un vacío con forma de Dios en cada corazón.
Blaise Pascal