Cuando lo superficial me cansa, me cansa tanto, que para descansar necesito un abismo.
Antonio Porchia
Si crees que no me debes nada,nada me debes, porque respeto todas las creencias y porque todas las creencias son iguales. Todas son creencias.
Antonio Porchia
Quien me tiene de un hilo no es fuerte; lo fuerte es el hilo.
Antonio Porchia
Quien abre todas las puertas puede cerrarlas todas.
Antonio Porchia
Se puede no deber nada devolviendo la luz al sol.
Antonio Porchia
La primavera del espíritu florece en invierno.
Antonio Porchia
Mi primer mundo lo hallé todo en mi escaso pan.
Antonio Porchia
Dios mío, casi no he creído nunca en tí, pero siempre te he amado.
Antonio Porchia
Aun pido enseñanza; pero ya no al hombre, sino a quien no recibe enseñanza del hombre.
Antonio Porchia
Sí, están equivocados, porque no saben. Y si supieran. . . Nada. Ni estarían equivocados.
Antonio Porchia
Hallé lo más bello de las flores en las flores caídas.
Antonio Porchia
No hallé como quien ser, en ninguno. Y me quedé, así: como ninguno.
Antonio Porchia
A veces de noche, enciendo la luz para no ver mi propia oscuridad.
Antonio Porchia
Lleve cada uno su culpa y no habrá culpables.
Antonio Porchia
Las alturas guían, pero en las alturas.
Antonio Porchia
Lo que dicen las palabras no dura. Duran las palabras. Porque las palabras son siempre las mismas y lo que dicen no es nunca lo mismo.
Antonio Porchia
Las dificultades también pasan como todo pasa, sin dificultad.
Antonio Porchia
Sabes tanto de mí y no me comprendes. Saber no es comprender. Podríamos saberlo todo y no comprender nada.
Antonio Porchia
El recuerdo es un poco de eternidad.
Antonio Porchia
Porque crees que me has comprendido has dejado de comprenderme.
Antonio Porchia
Quien va de fuego en fuego, muere de frío.
Antonio Porchia
Con las palabras que no he dicho he desarmado mis armas.
Antonio Porchia
Quien se queda mucho consigo mismo, se envilece.
Antonio Porchia
Hallarás la distancia que te separa de ellos, uniéndote a ellos.
Antonio Porchia
Cuando no puedes hacerme reír o llorar, sólo puedes cansarme.
Antonio Porchia