Ni la sociedad, ni el hombre, ni ninguna otra cosa deben sobrepasar para ser buena los límites establecidos por la naturaleza.
Ninguna buena acción queda sin castigo.
Ninguna casa debería estar nunca sobre una colina ni sobre nada. Debería ser de la colina. Perteneciente a ella. Colina y casa deberían vivir juntas, cada una feliz de la otra.
Ninguna certeza existe allí donde no puede aplicarse alguna de las ciencias matemáticas o de las que están unidas con ellas.
Ninguna ciencia, en cuanto a ciencia, engaña; el engaño está en quien no sabe.
Ninguna cosa hay tan difícil como el arte de hacer agradable un buen consejo.
Ninguna cosa impuesta por la violencia será duradera. La violencia lleva implícita en sí misma la debilidad.
Ninguna cosa tiene su valor real, ni efectivo en sí mismo, sólo tiene el que nosotros le queremos dar; y éste se liga precisamente a la necesidad que tengamos en ella; a los medios de satisfacer esta inclinación; a los deseos de lograrla y a su escasez y abundancia.
Ninguna criatura humana es comprendida por criatura humana alguna. Todo lo más, por costumbre, paciencia, interés, amistad, se aceptan o se toleran.
Ninguna época ha sabido tantas y tan diversas cosas del hombre como la nuestra. Pero en verdad, nunca se ha sabido menos qué es el hombre.
Ninguna esperanza queda de virtud, cuando no solamente deleitan los vicios, sino que se aprueban.
Ninguna fuerza abatirá tus sueños, porque ellos se nutren con su propia luz. Se alimentan de su propia pasión.
Ninguna mujer contrae matrimonio por interés: todas tienen la astucia, antes de casarce con un millonario, de enamorarse de él.
Ninguna nación fue arruinada jamás por el comercio.
Ninguna nación mantiene su palabra. Una nación es un gran gusano ciego.
Ninguna nación podrá emitir un juicio si antes no es capaz de juzgarse a sí misma. Pero a esta posición tan ventajosa suele llegar muy tarde.
Ninguna nube en el monte Tsukuba. Rubias libelulas.
Ninguna obra de arte es un resultado definitivo, sino una aproximación, un camino hacia ese misterio inefable al que se dirigen los creadores.
Ninguna obra maestra de ningún artista puede igualar la creación de un niño echo por una madre. El éxito no sólo se mide por lo que somos, sino también por el regalo que damos, ¡y el regalo de una madre es una persona!.
Ninguna orden de inteligencia divina une a las especies. Los lazos naturales son genealógicos junto a caminos contigentes en la historia.
Ninguna otra fragata nos lleva a todas partes como el libro.
Ninguna persona es capaz de escoger sin miedo.
Ninguna prueba, ninguna rectificación ni desmentido puede anular el efecto de una publicidad bien hecha.
Ninguna situación es tan grave que no sea susceptible de empeorar.
Ninguna sociedad democrática puede existir sin una prensa libre, independiente y plural.