Cosa del cielo es poseer la verdad, cosa del hombre es buscar la verdad. Quien posee lo verdadero acierta lo justo sin esfuerzo, logra el éxito sin reflexionar.
Creo -es nada más un creer- que de mi poesía bien podría hacerse el arco con que una gacela traza la mañana.
Creo en el Dios de Spinoza, que nos revela una armonía de todos los seres vivos. No creo en un Dios que se ocupe del destino y las acciones de los seres humanos.
Creo en la carne y en los apetitos, ver, oír, tocar... ¡Cuántos milagros!, y cada parte de mi ser es un milagro.
Creo en la democracia porque da rienda suelta a las energías de todo ser humano.
Creo en la religión de la humanidad. Es mucho mejor amar a nuestros semejantes que amar a dios. A aquellos los podemos ayudar; no podemos ayudar a éste.
Creo en la vida eterna en este mundo, hay momentos en que el tiempo se detiene de repente para dar lugar a la eternidad.
Creo en mi corazón, el que yo exprimo para teñir el lienzo de la vida...
Creo en mi corazón, siempre pero nunca vaciado.
Creo en ti y confió en que tu luz nunca se apagará.
Creo en un juicio final que castigará a aquellos que se atrevieron a lucrar contra este elevado arte.
Creo para comprender, y comprendo para creer mejor.
Creo que con el tiempo mereceremos no tener gobiernos.
Creo que cualquier cosa es posible si tienes la mentalidad, voluntad y deseo para hacerlo y dedicarle tiempo.
Creo que cualquier éxito en la vida se hace al entrar en una zona con un optimismo ciego y furioso.
Creo que decir una cosa significa conservarle la virtud y despojarla del terror. Los campos son más verdes en el decirlos que en su verdor. Las flores, si se describen con frases que las definan en el aire de la imaginación, tendrán colores de una permanencia que la vida celular no permite.
Creo que el ateísmo es tan pernicioso como la superstición.
Creo que en la política ya sé diferenciar entre los pecados de los hombres y la limpieza de las ideas.
Creo que es un gran error considerar cobrar altos impuestos a los vinos como un impuesto al lujo, si lo hiciéramos estaríamos cobrándole impuestos a la salud de nuestros ciudadanos.
Creo que la Biblia es el mejor don que Dios jamás haya dado a los hombres.
Creo que la conciencia de la pasión te hace actuar muy distinto.
Creo que la verdad desnuda no es moral.
Creo que las mujeres sostienen el mundo en vilo, para que no se desbarate mientras los hombres tratan de empujar la historia. Al final, uno se pregunta cuál de las dos cosas será la menos sensata.
Creo que lo que llaman cuentos de hadas es una de las formas más grandes que ha dado la literatura, asociada erróneamente con la niñez.
Creo que mi madre fue siempre fiel a la infidelidad de mi padre y eligió la castidad. La castidad de mi madre era peor que la de una virgen, porque ella había conocido el placer durante unos meses y luego renunció a él para toda la vida.