No solemos considerar como personas de buen sentido sino a los que participan de nuestras opiniones.
A mi perro pimperl dele usted una porción de tabaco español, un buen pan y tres besitos.
Allí donde el mando es codiciado y disputado no puede haber buen gobierno ni reinará la concordia.
Antes de poner en duda el buen juicio de tu mujer, fíjate con quien se ha casado ella.